Más de mil trabajadores de Corpoelec Carabobo han renunciado por pérdida de beneficios laborales

EL CARABOBEÑO

 

Solo 248 mil bolívares al mes es lo que cobran los encargados de restablecer el servicio eléctrico en Carabobo tras cada falla. Es un trabajo que hacen al subsidiar a la estatal con el pago de sus bolsillos de cada reparación de un caucho o mantenimiento mayor o menor de los pocos vehículos que quedan. Se trata de una crisis que se ha traducido en la renuncia de más de mil personas de la nómina de Corpoelec en la entidad.

Un poco más de mil 500 trabajadores de tres mil seis que tenía la firma en la región es lo que queda en medio de una situación de precariedad que se profundiza conforme pasan los meses. Ernesto González, secretario general del sindicato en la entidad, denunció que son ellos quienes financian a la compañía y hacen lo que sea para que las cosas funcionen. “Para resolver un circuito subterráneo necesitamos un teipe y que no nos dan en la compañía sino que tenemos que utilizar bolsas de mercado, solucionamos pero al día siguiente vuelve a fallar”.

Los precarios sueldos que reciben en la actualidad se limitan a salario mínimo más una bonificación de 700 mil que fue anunciada recientemente y que no es contable en las prestaciones sociales. “Nos están destruyendo nuestros beneficios, los estamos perdiendo todos”.

A eso se le suma la exigencia de tener el Carné de la Patria para poder recibir el beneficio de una bolsa de comida al mes por la que deben pagar. “Eso es discriminación y no lo podemos permitir porque todos tenemos derecho a la comida”.

El sindicalista, en asamblea de trabajadores, aprovechó para aclarar que el personal de Corpoelec no actúa en contra del sistema eléctrico nacional. “Queremos desmentir al ministro, los trabajadores no somos saboteadores, nosotros financiamos el sistema, y aún así nos señalan de saboteadores”.

Las renuncias masivas se traducen en 10 mil en todo el país, de acuerdo a Ángel Navas, presidente de la Federación Nacional de Trabajadores Eléctricos (Fetraelec), quien también estuvo presente en la asamblea realizada en Carabobo. “Muchos no tienen cómo pagar transporte para ir a los centros de trabajo, los comedores de la mayoría de las plantas están colapsando por falta de recursos, se están dando cierres de instalaciones porque quitaron mecanismos de seguridad y resguardo de la industria”.

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